TSA (Tintura Espagírica-Alquímica de Solanimus)

Aquí no hablaremos de operaciones relacionadas con la alquimia, sino puramente de operaciones espagíricas que nos permitirán producir productos espagíricos individuales (TSA) o, mezclando las diversas preparaciones espagíricas individuales, obtener productos espagíricos compuestos. Compararemos una Tintura Espangírica o Espangírica, como más te guste, y una Tintura Espangírico-Alquímica de Solanimus, veremos que al principio la preparación será la misma, pero en la continuación habrá diferencias importantes.
Tanto la tintura espagírica como la tintura espagírica-alquímica se realizan a partir de una planta que puede ser fresca o seca, siempre es preferible partir de una planta fresca, ya que los principios activos contenidos en ella serán mayores que la planta seca. Algunas plantas se procesan secas porque para nosotros los occidentales es casi imposible encontrarlas frescas, por ejemplo Ginseng, Canela, etc.. La planta se cosecha, en cualquier caso, en su período balsámico, es decir, en el período en el que contiene una mayor cantidad de ingredientes activos, cada planta tiene su período balsámico, puede ser primavera, otoño o una de las estaciones restantes. Una vez cosechada la planta, se deja macerar en una solución hidroalcohólica (agua más alcohol). El alcohol será, por supuesto, alcohol espagírico también llamado “alcohol tartarizado”, que en mi opinión sería mejor llamarlo “alcohol destartarizado” ya que tratamos de eliminar de él todos los depósitos tártaros que contiene. Este alcohol estará en un grado predeterminado dependiendo de la planta utilizada (todos los ingredientes activos no se extraen con el mismo contenido de alcohol, algunos son más o menos solubles en agua). La mayoría de las plantas deben macerarse en una solución hidroalcohólica que puede variar de 45 a 55 grados de alcohol volumétrico. La planta se deja macerar en esta solución durante unos 30 días (ciclo lunar) y estará en una proporción de 1 en cinco con la solución (R.E. 1/5), o 4 litros de solución por kilo de planta, o más bien de su residuo seco. Residuo seco porque la relación debe hacerse con la planta que ya no contiene agua (residuo seco), esto también para verificar el contenido de alcohol de la solución, para ello basta con tomar 100 g de planta fresca y ponerla en un horno de secado, dejarla secar, extraerla y pesarla (este peso que se obtendrá se llama “residuo seco”), Por ejemplo, si pesaba solo 50 g ahora, significa que los otros 50 g estaban compuestos de agua, por lo que un kilogramo de planta fresca corresponderá a 500 g de planta seca y es a partir de aquí que comenzaremos a hacer los cálculos de la relación de extracción. En la espagiria a menudo se dice que la relación de extracción debe estar saturada, en otras palabras, la planta fresca se coloca en el recipiente y luego se vierte la solución hidroalcohólica hasta que la planta esté completamente sumergida [esto generalmente conduce a una relación de extracción que varía de 1/4 a 1/5, dependiendo de la planta utilizada, en otras palabras, en presencia de plantas voluminosas, como la caléndula (Calendula officinalis), tomará una mayor cantidad de solución (R.E. mayor), mientras que en presencia de pequeñas plantas voluminosas, como el ginseng (Panax ginseng), tomará una menor cantidad de solución (R.E. minor)].

La diferencia importante que se encuentra desde las primeras etapas operativas es que la tintura espagírico-alquímica de Solanimus se pone a macerar, no con alcohol etílico simple, sino con un alcohol espagírico, en un circulador por lo que, mientras la planta macera, la solución hidroalcohólica de la parte inferior del frasco se evaporará y la elevación se condensará en la parte superior del mismo, Luego desde aquí se deslizará a lo largo de las paredes para descender nuevamente en la parte inferior. Esta operación se llama circulación y es en todos los aspectos similar a la gran circulación o circulación del Macrocosmos, o la que ocurre constantemente en la tierra, ya que aquí tiene lugar dentro de una vasija se llama circulación del microcosmos. Esta circulación hace que el disolvente (solución de agua más alcohol) sea más delgado, por lo tanto más penetrante y es por esta característica que el mismo disolvente, gracias a la circulación, habiéndose vuelto más delgado y teniendo por lo tanto más poder penetrante, podrá extraer de la planta una mayor cantidad de ingredientes activos permitiéndonos tener un producto con una mayor concentración de estos principios. Una vez filtrada la solución, la planta permanece en el recipiente y se prensa y el líquido, así obtenido, se filtra y se añade al líquido obtenido previamente. En este punto, la planta así prensada se toma y se quema para obtener cenizas. Ahora tome la solución obtenida previamente y póngala en una “damajuana” de cuello ancho y luego coloque las cenizas obtenidas previamente de la quema de la planta en su interior. Encima de esta “damajuana” de cuello ancho se coloca boca abajo otra “damajuana” con un cuello ancho, de modo que las dos boquillas de las damajuanas coinciden y luego, esta articulación, se sella con un laúd. El luto se utiliza para unir las dos bocas de las damajuanas de cuello ancho, está formado por una tira de papel que se empapa en una pasta formada por harina, agua, clara de huevo, lima y/o arcilla. Esta tira se coloca alrededor de la articulación que forma las dos bocas de las damajuanas superpuestas (este luto fue llamado por los antiguos “Luto di Sapienza”). Cuando la tintura espagírica esté madura, el luto se dividirá y esto indicará que la circulación ha terminado. La rotura del luto se produce porque la circulación hace que el tinte sea más delgado, por lo tanto más volátil, su punto de evaporación bajará y por lo tanto mayor líquido, con la misma temperatura, se convertirá en vapor, esta transformación provoca un aumento de volumen, consecuentemente un aumento de presión dentro del recipiente, presión que romperá el laúd. Este jarrón formado por estas dos “damajuanas” se llama “microcosmos”, se coloca al aire libre expuesto al “sol y luna”. El calor hará que la solución que se encuentra en la parte inferior del recipiente se evapore y comience a subir en la parte superior (“damajuana” boca abajo), este vapor se pegará a las paredes y se transformará, condensándose, en pequeñas gotas que, deslizándose a lo largo del vidrio de la damajuana superior, caerán nuevamente en la parte inferior del jarrón, y luego se evaporarán y subirán nuevamente y así continuamente, es por eso que el interior del jarrón se llama “microcosmos”, porque en el interior sucede lo que en la naturaleza, “Macrocosmos”, sucede continuamente (lluvia que cae, se evapora y sube, se condensa en lo alto del cielo y cae, y así sucesivamente). Este proceso se llama circulación, ya que es un ascenso y descenso perpetuo de la materia. Cuando el luto se divida será la señal de que el tiempo de circulación ha terminado, las dos “damajuanas” se separarán, la solución se filtrará con un filtro de papel de celulosa pura. Con esta operación obtendrá 2 ventajas, las sales volátiles (oligoelementos de la planta) ahora estarán en solución y la tintura se habrá energizado.

Aquí termina la preparación de una tintura espagírica, mientras continúa el procedimiento para hacer una tintura espagírico-alquímica de Solanimus, veamos cómo:

El residuo que quedará en el filtro se calcina y lixivia tres veces y luego las sales purificadas así obtenidas se expondrán a la luna llena para que entren en delicuescencia. Una vez hecho esto, se obtendrá un aceite que tendrá en sí mismo la Energía de la Naturaleza, será muy rico en Prana, por lo tanto fuertemente energético. Ahora tome esta sal líquida y viértala en la solución obtenida de la circulación con las cenizas y ponga todo a circular durante un ciclo lunar, comenzando desde la Luna Nueva y terminando con la Luna Nueva si se han utilizado raíces de plantas, o comenzando desde la Luna Llena y terminando con la Luna Llena si se han utilizado las partes aéreas de la planta. Después de hacer circular todo en un circulador la Energía de la Naturaleza ahora estará en el tinte, filtrará, dejará que se asiente y vierta la tintura en otro recipiente, teniendo cuidado de no agitar el frasco, porque la sustancia en el fondo no es más que la sal no entró en solución que debe ser eliminada.

Veamos ahora las ventajas de una tintura espagírico-alquímica de Solanimus:

  • La circulación hizo que la solución hidroalcohólica fuera más delgada, dándole un poder más penetrante y luego envió las sales contenidas en las cenizas de la planta, o oligoelementos, a la solución. En la tintura espagírico-alquímica de Solanimus tenemos dos efectos que actúan en sinergia: los oligoelementos y los principios activos contenidos en la planta.
  • en la tintura espagírico-alquímica de Solanimus la circulación tiene un efecto dinamizador de la solución casi equivalente al proceso homeopático de sucusión, esto se obtiene gracias a la continua expansión y contracción de la materia.
  • la circulación se realiza al aire libre, de esta manera no tendríamos otra ventaja de la tintura espagírico-alquímica de Solanimus y precisamente la influencia del “sol y la luna”, en otras palabras de la energía positiva y negativa [energía ódica positiva (Od+) del sol y energía ódica negativa (Od-) de la luna. Esta energía se acumula gracias a la dilatación y contracción de los cristales (sales vegetales) contenidos en la tintura espagírico-alquímica de Solanimus que está circulando]. En la radiación solar (+) y la radiación lunar (-) hay neutrinos y fotones, los neutrinos actúan porque las sales están presentes dentro de la solución y se piensa que los neutrinos son los encargados de modificar la estructura atómica, mientras que los fotones tienen una memoria universal o más bien que son portadores de memoria cósmica y por lo tanto llevan este conocimiento de una parte del cosmos a otra. Si es cierto que la materia tiene su propia memoria, los fotones contienen en ellos la memoria universal o cósmica y es a través de ellos que se transmite esta memoria. Se cree que los neutrinos, como decíamos, cambian la estructura químico-física de una sustancia, pero no debemos olvidar los rayos cósmicos que viajan casi a la velocidad de la luz, llegando hasta nosotros después de unos pocos millones de años. La atmósfera de la Tierra los ralentiza y los rompe en enjambres de partículas menos penetrantes (es por eso que la circulación también es útil en este caso, ya que la materia tiene momentos que se expanden, dilatan y, por lo tanto, con mucha más probabilidad de que estas partículas puedan penetrarla), pero algunos de ellos logran llegar a la superficie de la tierra con la fuerza suficiente para penetrar incluso bajo tierra, Y estas partículas traen su conocimiento donde penetran. Los rayos cósmicos son átomos ionizados, es decir, núcleos atómicos sin más electrones y, en consecuencia, cargados positivamente. Son casi todos protones (átomos de hidrógeno sin el único electrón que poseían) 90%, una parte son núcleos de helio 9% y el 1% restante está compuesto por los núcleos atómicos existentes restantes.
  • la última ventaja, y no por esta razón la menos importante, se obtiene exponiendo las sales a la luna para enviarlas a delicuescencia, es aquí donde se recoge el Prana (Energía Vital), luego se ponen en la solución y todo circula, transfiriendo así este Prana a la solución, obteniendo así una tintura espagírico-alquímica de Solanimus. Esta última operación está muy cerca de una operación alquímica muy importante. TSA es una tintura que tiene en sí misma los ingredientes activos de la planta, los oligoelementos de la misma y la energía dada por el Fuego Celestial o Mercurio, el más delgado, el Prana (Energía Vital) que después de ser capturado puede transmitirse a la Tintura Espangírica. Esta es la operación que nos permite decir que el tinte es, precisamente, también Alquímico. Es un tinte capaz de actuar en profundidad ya que es muy fino y tendrá una fuerte energía.

A diferencia de la tintura espagírica y la quintaesencia espagírica en el tinte espagírico-alquímico de Solanimus hay: mercurio filosófico (alcohol espagírico), azufre filosófico (ingredientes activos de la planta), sal volátil (oligoelementos de la planta), sal fija (residual de la planta calcinada y lixiviada) y prana (sales recogidas con la exposición de sal fija). Mire la figura en la esquina superior derecha para conocer los diferentes principios filosóficos contenidos en las diversas preparaciones espagíricas o espagíricas alquímicas.

Solanimus


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